La aplicación en Funbac de sulfato de cobre se puede utilizar como fertilizante o fungicida. Es comúnmente utilizado por jardineros y agricultores comerciales para prevenir problemas con hongos o moho.
Las enfermedades fúngicas pueden ser un problema real para los agricultores, especialmente cuando el clima es más cálido y húmedo de lo habitual. Los fungicidas de cobre suelen ser su primera línea de defensa, especialmente para los que prefieren evitar los fungicidas químicos.
El sulfato de cobre es una sustancia química creada con compuestos de cobre en combinación con ácido sulfúrico. Es un átomo de cobre unido a un azufre y cuatro átomos de oxígeno (el azufre y los cuatro oxígenos forman la parte «sulfato»). Se ha registrado para su uso desde 1956.
Funciona porque el átomo de cobre se une a las proteínas, alterando su estructura. Esto puede alterar las membranas alrededor de las células, haciendo que mueran. El sulfato de cobre es efectivo para matar hongos, algas e incluso caracoles de esta manera.
Tanto en la agricultura convencional como en la orgánica, se puede usar como fungicida. En aplicaciones orgánicas, se usa mucho, de hecho, es uno de los dos principales fungicidas orgánicos (el azufre es el otro).
También se usa el sulfato de cobre en aplicaciones no agrícolas, como matar algas en piscinas e incluso mantener bajas las algas en lagos naturales.
El sulfato de cobre tiene propiedades antifúngicas y es un ingrediente clave en algunos fungicidas comerciales para granjas, cultivos y jardines. Estos fungicidas generalmente se mezclan con agua y cal o carbonato de sodio, luego se rocían directamente sobre las plantas.
El efecto de dicho fungicida de sulfato de cobre es prevenir las infecciones fúngicas en el tejido vegetal sano o reducir las infecciones fúngicas activas que pueden enfermar o destruir la planta. Si una planta ya está afectada por hongos, los fungicidas de sulfato de cobre pueden ser efectivos para eliminar el hongo.
Es importante mencionar que este uso es efectivo solo si el fungicida se aplica poco después de que ocurra la infección por hongos. El cobre es un metal que, en forma disuelta, penetra en los tejidos vegetales y ayuda a controlar enfermedades fúngicas como:
Por lo general, los fungicidas se aplican en una proporción de 1 a 3 cucharaditas por galón (5 a 15 mL por 4 L.) de agua. Sin embargo, es fundamental leer atentamente las instrucciones de la etiqueta para determinar el modo de aplicación de cada producto específico.
Generalmente se vuelve a aplicar el producto cada siete a 10 días porque los fungicidas se degradan después de la aplicación. La mayoría no son dañinos para las abejas. Sin embargo, es mejor no rociar cuando las abejas se alimentan activamente de las plantas.
Nunca apliques fungicida de cobre en días muy calurosos y nunca mezcles fungicidas de cobre con otros productos químicos.
El Funbac 27-s es un poderoso fungicida de acción sistemática; está hecho con sulfato de cobre que es bactericida. Lo desarrollamos a la perfección para que al utilizarlo sea eficaz y logre eliminar la mayor cantidad de hongos y bacterias que puedan atacar la planta, su flor o su fruto.
Para que tenga un buen funcionamiento y no sea nocivo para tus plantas, lo mejor es no mezclarlo en tanques de hierro. Asimismo, asegúrate de regular el PH del agua Agrex abc (PH-5).
Está elaborado para que su ingrediente activo penetre en la hoja y la defienda de distintas enfermedades, bacterias y hongos. Recomendaciones para lograr mejores resultados:
¡Consíguelo en Eximgro!
En Eximgro nuestros servicios de producción y venta de fosfato monoamónico son cuidadosamente realizados y cumpliendo los más altos estándares de calidad.
Eximgro fue fundada en 1974 que nos complace en presentar nuestra línea de productos conformada por fertilizantes sólidos, fórmulas básicas y productos químicos de grado industrial como lo son el fosfato monoamónico y diamónico.